Como siempre, el año nuevo nos trae buenos y grandes propósitos que se repiten cada enero como dejar de fumar, realizar más ejercicio, y entre otros, la consecuente pérdida de peso aumentado durante el año e incrementado por las fiestas de Navidad. Referente al último punto, todos buscamos la “dieta perfecta” que consiga que alcancemos nuestro supuesto peso ideal con el menor esfuerzo posible y que se mantenga en el tiempo, pero… ¿cual es nuestra dieta ideal? o ¿qué necesitamos para que nuestra dieta tenga éxito? Lo más importante es “el sentido común”, es decir, una dieta completamente saludable y que se adapte a nuestras circunstancias (laborales, familiar, gustos, hábitos de alimentación, etc). Si nos ponemos a dieta y nuestro “nuevo régimen de comidas” es inviable para salir a comer fuera de casa y tenemos bastante vida social o tenemos un trabajo en el que tengamos que comer en restaurantes frecuentemente, nuestra “nueva dieta” les aseguro que tendrá un alto porcentaje de posibilidades de fracaso, o por ejemplo, aquellos padres que tengan que trabajar mucho tiempo fuera de casa y no tengan tiempo para cocinar y tengan que hacer varios tipos de comidas, les aseguro que el porcentaje de éxito para la pérdida de peso también será reducido. De todas formas, independientemente del tipo de circunstancias personales, también nos encontramos personas con un alto grado de fuerza de voluntad y autocontrol, a las cuales cualquier dieta para la pérdida de peso les será útil y tendrán un alto porcentaje de éxito (independientemente de que sean saludables o no).
Es por ello, para las personas “normales” que tenemos una fuerza de voluntad media… o baja, lo más aconsejable para conseguir que nuestra dieta tenga éxito será llevar un régimen de comidas que conlleven las siguientes pautas:
- Dieta saludable por encima de todo en el que entren todos los grupos de alimentos, sobre todo verduras y hortalizas, frutas, lácteos, carne, pescado, huevos y legumbres.
- Adaptada a las circunstancias personales, familiares y de trabajo de la persona que quiera perder peso.
- Mesura en las cantidades de comidas (esto no significa que no tengamos que comer, comer poco o pasar hambre)
- Llevar un régimen de comidas y no una dieta estricta como tal.