En los últimos años, las bebidas vegetales han ido ganando terreno en las estanterías de nuestros supermercados ofreciéndonos una amplia variedad de nuevos alimentos, siendo en muchas ocasiones, una alternativa a los productos lácteos, pero ¿qué es más saludable el consumo de los lácteos o de las bebidas vegetales? ¡Analicemos las opciones!

LÁCTEOS BEBIDAS VEGETALES
Provienen de la leche de los mamíferos, en su mayoría de la vaca.

Contienen una matriz alimentaria más compleja.

Aportan gran cantidad de minerales y vitaminas.

Contiene gran cantidad de hidratos de carbono ejerciendo una función prebiótica.

Aporta, en general, mayor cantidad de proteínas (excepto aquellos productos vegetales procedentes de la soja).

El perfil de los aminoácidos es más valioso (mayor digestión y absorción).

Elevado contenido de calcio de fácil absorción.

Provienen de un cereal, una fruta o un fruto seco.

La composición nutricional varía dependiendo del cereal, la fruta o fruto seco utilizado.

La calidad nutricional depende de la elaboración, porcentaje de la concentración, procesamiento y enriquecimiento con otros micronutrientes.

El perfil lipídico es muy diferente al de los lácteos:

  • Bebida de soja: alto contenido en isoflavonas y ácidos grasos omega 3, asociado a una mejoría en el perfil lipídico del consumidor, mejorando los niveles de colesterol y triglicéridos.
  • Bebida de avena: los betaglucanos se asocian a una reducción del colesterol LDL (conocido como el “colesterol malo”). También se le ha asociado a un menor riesgo de DM2 y al control de la glucemia plasmática.

Tanto los productos lácteos como las alternativas vegetales, son dos grupos de alimentos que forman parte de nuestra dieta mediterránea. Independientemente de que los lácteos y las alternativas vegetales pertenecen a grupos de alimentos distintos, no por ello tenemos que eliminar ninguna de ambas opciones. En los países desarrollados, a los consumidores de lácteos se les asocia con una menor probabilidad de ingestas inadecuadas de vitamina B2, B12, Ca, Mg y Zn, comparado con los no consumidores, sin embargo las bebidas vegetales (en su mayoría fortificados con vitaminas y minerales, como la vitamina D y el calcio) puede ser una buena opción para aquellos consumidores intolerantes a la lactosa, alérgicos a la proteína de la leche, o a aquellos que por su sabor no les resulte agradable. Por lo tanto, ambas opciones se pueden considerar beneficiosas como parte de una alimentación saludable.

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