Trastorno por Atracón

Cuando hablamos de trastornos de la conducta alimentaria (TCA), solemos pensar en anorexia y/o bulimia pero… conocéis el trastorno por atracón? El trastorno por atracón es uno de los TCA más usuales y menos reconocidas por parte de los que lo sufren. Fuerza de voluntad? personas comilonas?… cómo definiríamos este problema que conlleva a las personas que lo sufren a comer de manera compulsiva y sin control pero que a diferencia de la bulimia no tiene una actitud compensatoria? Para muchas personas la vía de escape a sus problemas o cualquier circunstancia que le lleve a un estado de nerviosismo, inseguridad o ansiedad, es la comida. Esta vía de escape nos hace comer de manera compulsiva y alimentos generalmente muy calóricos, hidratos de carbonos en su mayoría, grasas …, e incluso mezclando alimentos muy dispares, alimentos exentos de aquellos que estarían dentro de lo que podríamos definir como una dieta saludable. Pero, ¿cómo podemos saber si sufrimos este TCA? Los criterios según el DSM-5 para el trastorno por atracón son:

• Episodios recurrentes de atracones asociados a tres o más de los hechos siguientes:
  1. Comer mucho y más rápido de lo normal.
  2. Comer compulsivamente hasta sentirse lleno.
  3. Ingerir grandes cantidades de alimentos no sintiendo hambre.
  4. Comer solo. Las personas que lo sufren suelen sentir vergüenza debido a la cantidad ingerida.
  5. Sentimiento de culpabilidad, depresión y/o vergüenza posterior a los atracones.
• Malestar intenso debido a los atracones.
• Atracones producidos al menos una vez a la semana durante 3 meses.
• Los atracones no se asocian a un comportamiento compensatorio como puede ser la bulimia.

El tratamiento del trastorno por atracón tendría por objetivos la reducción del número de atracones y el mantenimiento en el tiempo de un régimen de comidas de alimentación saludable realizado a través de una terapia multimodal fundamentado en psicoterapia, nutrición y, en ocasiones, con tratamiento médico.

Consejos para evitar los atracones:

• Seguir estrictamente el tratamiento.
• No ser muy duro con uno mismo, los tratamientos necesitan su tiempo y nosotros también.
• No tengas alimentos en casa o en el trabajo que no debas ingerir y te inciten a comer más como dulces o aperitivos innecesarios (patatas fritas, frutos secos, etc).
• Escribe en un diario o libreta lo que ingieres al día, esto hará que tomes conciencia de lo que comes. Si tienes atracones, anota cómo te sentías antes del atracón, esto hará que conozcas qué es lo que te ha llevado a proceder a la ingesta compulsiva y, además, escribe qué podrías haber hecho para haberlo evitado (por ejemplo, ejercicio físico como salir a andar, tomarse un baño o ducha para relajarse, etc).
• Planea en la agenda como te gustaría que fuera la semana de tal manera que lleves una disciplina y un orden en tu vida: horarios de comidas, el régimen de comidas saludables, ejercicio físico (horas, días y tiempo para realizarlo), horario de trabajo, etc.
• NO hagas una DIETA PARA ADELGAZAR. Lleva un régimen de comida sano en el que introduzcas todos los grupos de alimentos en cantidades y cocinados saludables.
• Si crees que tienes este problema (o cualquier otro), acude a los especialistas. Son los que mejor te pueden ayudar y no te avergüences por ello, LO IMPORTANTE ERES TÚ.